En la zona central de Rumania existen muchas iglesias fortificadas. Hoy nos acercamos a la población de Harman, muy cerca de Brasov, a visitar una de ellas.
Harman es una población de unos 5500 habitantes situada a unos 10 kms al noreste de Brasov. Desde la capital de provincia hay que tomar la carretera nacional DN11, que une a Brasov con Targu Secuiesc, y tras una decena de kilómetros encontramos el desvío hacia Harman.
El principal reclamo turístico de este pueblo es su iglesia forticada, una de las más imponentes de la región.
La iglesia nace de la mano de los caballeros teutones, a principios del siglo XIII, quienes también construyeron otras edificaciones importantes en la zona como las ciudadelas de Feldioara y Rasnov o las iglesias fortificadas de Sanpetru y Prejmer.
Si bien la iglesia data del siglo XIII, la fortificación que la rodea se construyó dos siglos después. Está compuesta de tres círculos concéntricos de muros; el exterior es el más bajo, con menos de cinco metros de altura.
El segundo de ellos era más alto, con zonas de hasta 12 metros de altura, mientras que el tercero, interior, no se conserva en la actualidad.
El acceso a la fortificación se hace a través de un largo túnel, construido sobre unos arcos laterales.
En el patio interior podemos observar la iglesia románica, con su torre del campanario, y una serie de habitaciones inseridas en el muro interior.
Las habitaciones se hallan divididas en dos niveles, y a las del piso superior se accede por unas escaleras exteriores de madera.
Hoy en día estos espacios funcionan como museo, y en ellos se puede observar una clase de escuela antigua y otros espacios decorados como dormitorios o cocina.
Vídeo en YouTube:
Rumaniando 