La ciudadela de Alba Carolina se encuentra en el centro de la ciudad de Alba Iulia, capital de la provincia de Alba, situada en el centro de Rumania en la región de Transilvania. Se encuentra a 100 km de Cluj-Napoca y a 75 km de Sibiu, por la carretera que une a estas dos ciudades.
En la ciudadela de Alba Carolina se encuentra una de los lugares con mayor significado histórico para los rumanos: la Sala Unirii, el lugar donde el 1 de diciembre de 1918 se firmó el Acta de la Unión de Transilvania con el Reino de Rumania, dando lugar a la Gran Rumania. Desde entonces, cada 1 de diciembre se celebra el día nacional de Rumania.
La principal atracción turística de Alba Iulia es su ciudadela, que se fundó en la primera mitad del siglo XVIII. Está situada en pleno centro urbano, y a diferencia de las ciudadelas de Rasnov o Deva, sobre las cuales ya hemos hablado aquí y aquí, se encuentra prácticamente al mismo nivel que el resto de la ciudad.
La ciudadela de Alba Iulia tiene una superficie muy amplia, y posee una forma de estrella con siete puntas, con seis puertas de entrada. Se trata de una fortificación construida en estilo Vauban, de carácter defensivo, con muros de ladrillo separados por amplios fosos. Tiene siete puertas de acceso, y en su interior cuenta con dos catedrales (una católica, otra ortodoxa), varios edificios pertenecientes a la universidad de Alba Iulia, museos, hoteles, restaurantes y demás.
La catedral católica romana de San Miguel (Catedrala Sfântul Mihail) es considerada el principal exponente del arte románico en Transilvania. Posee además dos récords: es la catedral más antigua de Rumania (su construcción se inició a principios del siglo XI), así como la más amplia (93 metros de longitud). En ella se encuentran las tumbas de la dinastía de los Huniades y del primer príncipe de Transilvania, Juan Segismundo de Zapolya.
Justo delante se encuentra la catedral ortodoxa, también conocida como la Catedral de la Coronación, ya que aquí tuvo lugar el 15 de Diciembre de 1922 la coronación de Rey Fernando y la Reina María como soberanos de la Gran Rumania. Su arquitectura es de estilo bizantino.
Cerca de ambas catedrales, vemos varios edificios relevantes: el Palacio Episcopal, el Palacio del Príncipe, donde se alojó Mihai Viteazul en el siglo XVI, restos de la antigua Casa de la Moneda de Transilvania, el Monumento a los Héroes del Pueblo, la Campana de la Unión y varios otros.
En el interior de la ciudadela existen varias opciones para comer, desde restaurantes típicos hasta puestos de comida callejera. En la calle principal que une a las dos puertas de entrada de la ciudadela hay varios tenderetes donde hacer una comida rápida, así como en el foso que hay debajo de la puerta número 1.
Sin embargo, nuestra recomendación recae sobre un restaurante situado a las afueras de la ciudad, en la carretera nacional que une a Alba Iulia con Sibiu. Se llama Hotel Allegria, es un complejo turístico con hotel, restaurante, sala de fiestas, piscina y SPA. allegriahotel.ro. La oferta culinaria es muy amplia, y en verano existe la posibilidad de comer en la terraza situada en la parte trasera del hotel, junto a la piscina al aire libre.
El día 1 de diciembre, día nacional de Rumania, es el día en el cual la ciudad se colapsa por completo, debido a la afluencia masiva de turistas que desean celebrar el día nacional en Alba Iulia.
Cada día, a las 12 del mediodía se puede asistir a la ceremonia de cambio de guardia, un pequeño desfile militar en el que participan tropas a pie, guardia montada a caballo y salvas de cañones (esto último sólo los fines de semana). La mejor localización para ver este cambio de guardia es en la puerta 3, sobre el puente de madera.
Durante el verano, en las noches de los fines de semana se celebran conciertos y actuaciones al aire libre, mientras que en los meses de invierno se puede patinar en la pista de patinaje al aire libre que se instala en la plaza central de la ciudadela.
A finales de Abril, se celebra cada año el Festival Romano Apulum.
Vídeo con imágenes de la Cetate Alba Carolina: