En una aldea de la región de Buzau nos detenemos unos minutos a mirar un curioso monumento situado junto a la carretera nacional.
Ciuta es una pequeña localidad situada a 30 kilómetros al noroeste de Buzau. Las dos poblaciones están unidas por la carretera nacional DN10.
La escultura se encuentra entre las localidades de Magura y Ciuta. Se construyó en 1975 para celebrar el 375º aniversario del paso de Mihai Viteazul por el Valle de Buzau, en su camino hacia la región de Ardeal.
Mihai Viteazul fue uno de los señores medievales valacos más importantes del finales del siglo XVI, y durante un breve de tiempo fue el primer gobernante de facto de los tres estados medievales que conforman la actual Rumanía: Valaquia, Transilvania y Moldavia.
El monumento, de unos 15 metros de longitud, está situado en el emplazamiento donde las huestes de Mihai Viteazul pernoctaron en una noche de octubre de 1599.
A pesar de llamarse «fuente», al parecer este monumento nunca ha funcionado como tal, sino que se ha quedado como una escultura que marca un hito de la historia de Rumania.
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