El casino de Slanic-Moldova

Nos vamos hasta la zona más turística del distrito de Bacau para visitar esta ciudad balneario y echar un vistazo a su imponente casino, cuya restauración está prácticamente concluida.

La localidad de Slanic-Moldova se encuentra en las faldas de los Cárpatos Orientales, muy cerca del límite de los distritos de Bacau y Covasna, y es atravesada por el río Slanic, un afluente del río Trotus.

Para llegar a Slanic-Moldova tenemos antes que alcanzar Onesti, la segunda localidad más importante del distrito de Bacau, tras su capital homónina, y dirigirnos por la carretera nacional DN12A hasta la localidad de Targu Ocna, famosa por su mina de sal sobre la que ya hemos hablado aquí.

Nada más cruzar esta ciudad tenemos que desviarnos por la carretera nacional DN12B y transcurridos 15 km nos dejará en nuestro destino de hoy.

Slanic-Moldova es, ante todo, una localidad balnearia, conocida también con el sobrenombre de «la Perla de Moldavia».

Sus orígenes se remontan a principios del siglo XIX, cuando tuvo lugar el descubrimiento de sus manantiales minerales y los inicios de su uso para curar enfermedades.

La localidad fue adquiriendo cada vez más relevancia y protagonismo hasta que tuvieron lugar las operaciones militares de la Primera Guerra Mundial en el sector Oituz-Coșna-Cireșoaia, tras las cuales el balneario se destruyó y gran parte de la localidad quedó en ruinas.

La estación balnearia Slanic-Moldova es famosa por sus 20 manantiales de aguas carbonatadas, bicarbonatadas, ligeramente sulfurosas, cloradas, sódicas, hipertónicas, hipotónicas y oligominerales.

Estos manantiales se pueden visitar en un recorrido a lo largo del río Slanic, con una pasarela construida para tal fin, en un paísaje rodeado de montes de pinos a ambos lados del río.

Cada fuente cuenta con un panel en el que se explican las propiedades de sus aguas y para qué tipo de tratamientos están indicadas.

El edificio más imponente de Slănic-Moldova es su casino, que fue construido por artesanos italianos y del valle de Slănic entre 1892 y 1894, en estilo Art Nouveau, según los planos del famoso arquitecto de Iași, George Sterian.

Desde mediados del siglo pasado ha funcionado como centro cultural y, tras algunas décadas de abandono, finalmente un empresario local se hizo cargo de él y en el año 2025 lo ha restaurado y abierto al público.

En el tiempo de escribir este artículo, el casino, ahora rebautizado como Casino Real, funciona solo como bar con terraza, pero en su web prometen que próximamente le darán uso a su amplia sala de espectáculos y otros usos todavía por determinar.

Paseando por el parque del jardín que está delante del casino, nos hemos encontrado con este curioso e interesante cartel: un jovencísimo George Enescu, a la altura residente en Viena pero de vacaciones en Slanic-Moldova, dio su primer concierto público en este parque, con apenas 8 años de edad.

El gran músico y director de orquesta rumano dio un recital de violín que marcó el inicio de su destacada carrera como intérprete y también como filántropo, ya que se trató de un acto benéfico en favor de los pobres de la localidad.

Web oficial del casino: https://casinoregal.ro/

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