En el Oeste de Rumania existe un auténtico paraíso de los molinos de agua; los habitantes de la zona dicen que obtienen una harina muy fina y con un sabor único, proveniente de estos 22 molinos situados a lo largo de 3 km sobre el cauce rio Rudărica, en plenos Montes Almaj (Cárpatos Occidentales).
Eftimie Murgu se encuentra en la zona Oeste de Rumania, en la provincia de Caras-Severin, entre las ciudades de Orsova y Resita.
Saliendo desde Orsova hay que tomar la carretera nacional DN 6, en dirección a Caransebes. Llegados al pueblo de Plugova, hay que desviarse por la carretera nacional DN 57B, que cuenta con buen asfalto. Tras 40 km llegaremos al pueblo de Prilipet, y nos desviaremos a mano derecha por la carretera provincial DJ 57F. Por esta carretera en bastante mal estado tendremos que recorrer los últimos 7 km antes de llegar a Eftimie Murgu. Al final del pueblo empieza la zona con los molinos de agua, situados a ambos lados del cauce del río, que baja paralelo a la carretera.
Cada molino de agua pertenece a una agrupación de familias de pueblo, que tienen participaciones en el mismo. Las distintas familias propietarias del molino se reparten el uso del molino, en tramos de 12 horas, y acuden allí a moler el grano, como se lleva haciendo desde hace siglos.
Un molino de agua puede moler entre 120 y 140 kilos de grano en un día. En la actualidad sólo funcionan 4 o 5 molinos, de los 22 existentes.
Cada molino posee un nombre diferenciado, que puede ser el de la persona que los construyó, el nombre del lugar en el que están emplazados, o el nombre de una familia más relevante de aquellas que son propietarias del molino.
Antiguamente el pueblo situado al lado del río se llamaba Rudaria, pero en 1970 adoptó el nombre de Eftimie Murgu, en honor a un profesor, abogado y político nacido en Rudaria que fue deputado en Budapest en tiempos de la revolución de 1848.
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